La vida de Cristi y compañía

domingo, marzo 12, 2006

Lactancia



Llevo ya tiempo queriendote contar una de las experiencias más maravillosas que he vivido contigo, y es ese vículo tan especial que entablamos con la lactancia. Ya hace casi un mes que no tomas leche materna pero ni tu lo has olvidado ni por supueto yo, que no solo no lo he olvidado sino que jamás podré olvidar. Aún me buscas el pecho y lo señalas como algo conocido e incluso a veces te acurrucas sobre él para sentir su calor, pero ya te has hecho mayor e independiente y has roto ese vículo que tanto nos unía.
Esta foto que te pongo fue de un par de horas despues de nacer, y fue nuestro primer contacto piel con piel a través de la lactancia. En aquel momento, en el que tenía la felicidad y la emoción a flor de piel, poco podía imaginar lo que estos momentos de unión iban a suponer para las dos. Siempre tuve claro la lacancia y no me había puesto ni metas ni objetivos pero despues de este año alimentandote de mí me reafirmo mucho más si cabe en ello.
Te alimentaste en exclusividad de pecho durante 6 meses y todo fue de maravilla, en seguida nos compenetramos y el momento de la comida era "nuestro" momento, íntimo, próximo, exclusivo e irrepetible. Creo que es de las cosas que he hecho en la vida de la que me siento más orgullosa, para mi ha sido de lo más gratificante incluso a pesar de los primeros meses de agotamiento de las noches sin dormir y demás, como que se me está difuminando en la memoria esos "malos" ratos y solo me van quedando los momentos de calor, de proximida de vínculo irrompible.
De hecho te costó mucho ir dejando el pecho, la cuchara no la querías y fue muy dificil iniciarte en la comida, has ido muy retrasas en ese sentido pero no me ha importado en absoluto, luego poco a poco te fuiste acostumbrando a los agentes externos primero el biberon (que aunque seguía siendo de leche materna no era lo mismo) y luego la cuchara y las papillas, pero siempre había un huequito para tu "tetuchi" como la hemos llamado en casa.
Poco a poco fuiste dejandolo y te quedó solo las tomas que hacias si te despertabas por la noche y al final empezaste a dormir de un tirón y solo quedó el desayuno hasta que hace ya un mes que has roto esta unión y que te hace ser un poco más independiente. También el pecho te ha hecho una niña fuerte casi no te pones malita (crucemos los dedos) y aunque parecía que podias ser una niña muy dependiente de mami al final es todo lo contrario eres de lo más sociable y extrovertida.
Gracias Cristina por regalarme este año de experiencias que tanto me ha enriquecido

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